Esta es la penúltima entrada de esta serie de artículos sobre la dirección de proyectos, donde hablaremos del control de los costes del mismo. Cualquier proyecto lleva aparejada una inversión de recursos (económicos, materiales y humanos). Mediante una inversión se cambia una satisfacción inmediata del capital por una esperanza futura de disfrutar el capital con un rendimiento superior. Cuando la inversión se realiza dentro de proyectos se espera que los recursos técnicos y humanos generen un activo cuya explotación o venta genere mayores beneficios que la inversión inicial.
Aventuras y reflexiones de un ingeniero informático