Una de conferencias

Siempre es una satisfacción personal poder realizar determinadas colaboraciones y una de las más especiales es la de impartir ciertas charlas o conferencias en la facultad de informática de la universidad de La Laguna. Así que cuando mi antiguo profesor Jose Luis Sánchez me lo propuso no dude ni un segundo en aceptarlo a pesar de mi falta de tiempo. Buen conocedor de mi trayectoria profesional y experiencia en la aplicación de la informática en el ámbito de la televisión, me pidió mi visión sobre algunos contenidos de la asignatura "gráficos y multimedia" impartida en el Master de ingeniería informática. De esa conversación finalmente derivó en impartir una conferencia sobre las herramientas que se han utilizado en TV Canaria para el desarrollo de aplicaciones para el tratamiento de vídeo.
La conferencia se basó principalmente en dos partes. En la primera explique y presenté una de las herramientas más útiles y contra la que hemos desarrollado mucho de los programas de tratamiento de vídeos en Videoreport Canarias (FFMPEG) y la segunda a explicar la aplicación de esa herramienta a la hora de desarrollar aplicaciones a medida con ella.

FFMPEG es una herramienta de código abierto, libre, múltiplataforma (Mac, Windows y Linux) y que se distribuye mediante licencia GNU lo que implica que puede utilizarse para el desarrollo de otros proyectos sin coste adicional. Y a pesar de su árido aspecto, ya que se distribuye como una aplicación de consola, es muy potente y esta característica te permite desarrollar programas que llamen al ejecutable con sus parámetros por línea de comando controlar el resultado mediante la monitorización de STDOUT de la misma. Con esta herramientas no sólo puedes trascodificar vídeo, sino que además te permite cortarlo, unir trazos de clips, aplicar filtros y efectos y separar y mezclar canales de audio. Gracias a estas herramientas se ha podido proceder al cambio tecnológico que supone la sustitución de cinta de vídeo al fichero informático y que permiten que miles de vídeos circulen por una red informática en la actividad diaria de una televisión y que todos lleguen a su destino en tiempo y forma correcta. La descripción de mi experiencia desarrollando contra ffmpeg puede ser un buen tema para una entrada de este blog, pero no es el objetivo de esta.

Tras juguetear con la herramienta y mostrar su potencial les conté las aplicaciones que se han desarrollado en TV Canaria, por ingenieros de la universidad de La Laguna y algunas particularidades importantes que hay que tener en cuenta a la hora de hacerlo. Mi objetivo era simplemente que se empaparan de algunas ideas muy concretas pero que son fundamentales para que un ingeniero enfoque bien sus proyectos profesionales.

De todas formas lo mejor de la experiencia estaba por llegar. Tras el "rollo teórico" y en el turno de preguntas se estableció una especie de debate o mesa redonda con los alumnos dónde tuve la oportunidad de transmitir mi visión de la profesión y el contraste entre mi visión cuando era estudiante y ahora. Trataré de resumir los mensajes que intenté transmitir a los alumnos.

• Cuando salí de la carrera con el título en la mano, pensé que me iba a abrir muchas puertas simplemente por el hecho de tenerlo. Que las empresas simplemente iban a quererme por ser el poseedor de ese título y de poder contar en plantilla con un ingeniero. Tras varios meses en el mercado laboral te das cuenta que el título sólo te ayuda en la prueba de selección. Tras esta fase a la empresa lo único que le preocupa es que hagas tu trabajo y que aportes soluciones a los problemas de la misma. El título no sirve de nada tras la selección si no aplicas el conocimiento que acredita en encontrar soluciones a los problemas.
• La palabra ingeniero viene de ingenio, es decir de pensar, encontrar soluciones y crear. Un ingeniero no está para reparar ordenadores, instalar software o configurar sistemas. Para ello están los técnicos con una formación específica para ello. La diferencia entre un técnico y un ingeniero es que los ingenieros están formados para crear, para aportar soluciones de valor añadido. De encontrar mediante el diseño de aplicaciones informáticas respuesta a determinados problemas que hacen que las empresas sean ineficientes desde el punto de vista económico y operativo. Y a pesar de que haya muchos técnicos tirando también de ingenio, su trabajo es mantener lo que existe y el de un ingeniero crea nuevas soluciones. En eso es en lo que un empresario se gasta la diferencia salarial entre uno y otro. Si pretendes entrar en un trabajo con condiciones de ingeniero para hacer el trabajo de técnico, pronto el empresario se dará cuenta de que le sale más rentable contratar a un técnico.
• En un momento de la charla alguien me preguntó si pensaba que había mercado para el software a medida. Mi respuesta fue rotunda. Sí. Pero que el problema es que no había cultura empresarial de ingeniero informático para software a medida. En la actualidad no se concibe una empresa sin un contable. Sin embargo y a pesar del peso que tiene en las empresas la tecnología, las comunicaciones y la información, la informática se sigue viendo como un mal necesario en lugar de como una potentísima herramienta para mejorar los procesos, ahorrar recursos y ser más competitivo. Sigue sin haber conciencia que el dinero que se invierte en un ingeniero siempre acaba retornado más pronto que tarde.
• En otra fase del debate les confesé a los alumnos que había sido muy afortunado durante mi vida profesional porque nunca ma había faltado el trabajo y porque siempre había podido desarrollar software a medida en todos los sitios en los que había pasado. Que el software a medida es una droga para el empresario, que cuando la prueba y descubre su potencial ya no puede renunciar a ella. Finalmente alguien en la sala apuntó que quizás por esa convicción de afrontar los trabajos como ingeniero (con mentalidad creativa) y no sólo como técnico había tenido tanta suerte en mi vida profesional. Y después posteriormente pensándolo con más tranquilidad llegue a la conclusión de que quizás fuera cierto. Y que las empresas contratan informáticos sin saber que necesitan ingenieros. Y que si los ingenieros asumen su verdadero rol, siendo proactivos, teniendo iniciativas y dando un paso al frente a la hora de detectar problemas y de proponer soluciones, están llamados a ser piezas claves en las organizaciones.

Me gustaría agradecer desde estas líneas a Jose Luis Sánchez la oportunidad que me brinda de poder vivir este tipo de experiencias. Estas jornadas me parecen muy constructivas no sólo para los alumnos sino también para el ponente. Ayuda a ambas partes a conocer y aprender de la otra. La figura del ponente o profesor asociado no sólo creo que es fundamental para acercar a las aulas el mundo real y el panorama empresarial que está en la calle, sino como un soplo de aire fresco para algunos profesionales como yo, que necesitan un poco de pureza, de romaticismo en la esencia de la profesión y que sin duda transmiten los alumnos universitarios.

Para mi será un placer poner este tipo de colaboraciones en mi lista de costumbre profesionalmente saludables.

Fotos de Sergio Gil de Arana